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Reflexiones sobre el proceso de aprendizaje

El trabajo se inicia con una reflexión sobre el proceso de aprendizaje, sobre la necesidad del esfuerzo y la persistencia para alcanzar conocimientos. Los alumnos piensan en posibles objetos que puedan servir de metáfora del aprendizaje y el crecimiento personal e intelectual. Concretan estas metáforas mediante el dibujo del objeto elegido y un texto sobre su elección. Salvador Juanpere los comenta en el blog. Más tarde explicará en qué objeto ha pensado él.
En el blog se pueden ver también dos presentaciones que Salvador Juanpere dedica tanto a obras propias sobre el proceso y el trabajo como a obras de diferentes artistas en torno al objeto como metáfora.

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Concreción del proyecto: las escaleras de mano

Después de reflexionar sobre el proceso de aprendizaje y los objetos que metafóricamente lo pueden representar, se inicia la segunda fase del trabajo. Durante una visita de los alumnos y los profesores a su taller, Salvador Juanpere presenta el objeto que ha escogido para representar el proceso de aprendizaje: la escalera de mano. Explica también el siguiente paso de trabajo: buscar, fotografiar y dibujar con exactitud escaleras de mano que los alumnos encuentren en su entorno cercano.
En el blog de la residencia, Salvador Juanpere publica varios documentos sobre esta fase de trabajo.

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Documentando las escaleras de mano

Todos los participantes en el proyecto (artista, profesor y estudiantes) buscan escaleras de mano en su entorno cercano. Se sacan fotografías de documentación y se acompañan con textos descriptivos vinculados a las experiencias relacionadas con estas escaleras cotidianas. El conjunto de escaleras y textos pueden verse en el apartado “Pugem escales” (“Subimos escaleras”) del blog.
Artículo "Pugem escales" (en catalán) de la residencia de Salvador Juanpere en el Instituto Infanta Isabel d'Aragó.

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Analizar, dibujar, medir y despezar las escaleras

A partir de las fotografías, se miden y se analizan las escaleras de mano, y se dibujan: primero en esbozos y después esquemáticamente para poder individualizar sus piezas principales. Los objetos reales se reducirán a escala 4:5 y las piezas se trasladarán al programa AutoCAD para encargar a una empresa que haga el corte en madera.

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Trasladando las escaleras al AutoCAD

Después de haber medido y analizado detenidamente las escaleras de mano elegidas, se trasladan al programa AutoCAD para poder hacer el encargo a la empresa que cortará las láminas de madera.

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Construyendo y pintando las escaleras

Se inicia el proceso de construcción de las escaleras. Se reciben las láminas precortadas y es el momento de separarlas, numerar las piezas, limarlas y pulirlas una a una y, finalmente, construir las 63 escaleras que conformarán la instalación escultórica Diez mil horas. Después, se pintan de blanco.

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Incorporación de un nuevo elemento y finalización

En la fase final del proceso de creación, se incorpora un último elemento a la obra: 40 lingotes de bronce que se disponen al pie de las escaleras y en los peldaños. Los lingotes de bronce, materia prima del escultor, representan la potencia, el estado latente, lo que está a la espera de realizarse (como el A Bao A Qu al pie de la Torre de la Victoria).

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Diez mil horas: la obra finalizada

El proceso de realización de Diez mil horas culmina con la exposición de la instalación escultórica en el Instituto Infanta Isabel d’Aragó del 1 al 4 de junio de 2010. Integran la obra 63 escaleras pintadas en blanco y 21 lingotes de bronce. En las vitrinas se expone material del proceso de creación (dibujos, textos, cuadernos de trabajo de Salvador Juanpere y los estudiantes, etc.).
Posteriormente la obra se expuso en noviembre y diciembre de 2010 en el Nivel Cero de la Fundación Suñol.