Urati laboratori EN RESiDENCiA en el Instituto Escuela Eixample

Una lata de refresco tarda diez años en descomponerse. Una bolsa de plástico, alrededor de mil quinientos. Los residuos nucleares tardan más de dos millones y medio de años. Un cuerpo humano, solamente unos cuantos meses. Esta botánica de la muerte y la degradación es en parte la causante de que no seamos capaces de apreciar nuestros actos perpetrados en la naturaleza. "Eterns profetes de la fatalitat" es una propuesta que busca afrontar la siguiente pregunta; ¿cómo afrontamos la idea de la catástrofe? En el mundo en el que habitamos hemos crecido con la idea de una catástrofe inminente, donde el futuro solo es un campo en ruinas. Esta idea paralizadora actúa como un ancla de la imaginación, que impide a menudo que nuevas generaciones puedan imaginar nuevos futuros posibles. "Eterns profetes de la fatalitat" pretende ser un espacio de reimaginación. Un territorio concebido para que, a través de nuestra presencia en él, intentemos ser conscientes de nuestra afectación en el entorno. Siguiendo las herramientas desarrolladas en Urati Laboratorio, trabajaremos en una propuesta a medio camino entre la instalación expositiva y la pieza escénica, donde profundizar sobre cuál es la idea de catástrofe en nuestros tiempos. Para ello, utilizaremos las herramientas que nos son habituales, realizando una investigación que combine el uso de las tecnologías de realidad virtual y de realidad aumentada.